Cirugías Endoscópicas

CIRUGÍA ENDOSCÓPICA EN GENERAL

Bajo el término cirugía endoscópica, se agrupan varias técnicas de observación directa del interior de un órgano o cavidad mediante un instrumento óptico (un tubo con iluminación conectado a una cámara de vídeo y a un monitor de televisión) que se introduce a través de orificios naturales del cuerpo humano o de la pared abdominal, como pueden ser la histeroscopia y la laparoscopia.

Se trata de una cirugía mínimamente invasiva que ha supuesto un avance respecto a las intervenciones abiertas tradicionales, ya que es una técnica mucho más fiable y precisa, se presentan menos traumas posteriores y además los resultados estéticos son mejores. Normalmente se realiza bajo anestesia general.


La endoscopia es una técnica que puede utilizarse tanto para el diagnóstico y observación como el tratamiento y cirugía. Concretamente la cirugía endoscópica se utiliza en diversos campos de la Medicina: es muy habitual la cirugía endoscópica en Ginecología, llamada Histeroscopia, para tratar las patologías del útero, como quistes, endometriosis, miomas o incluso para realizar una ligadura de trompas, estudiar la infertilidad, o una histerectomía o extirpación del útero. Por otra parte, es también frecuente tratar estas patologías mediante laparoscopia, que se diferencia en que aborda la cirugía desde un orificio en la cavidad abdominal.

También se utiliza en otros campos, como la Otorrinolaringología, donde es muy común la cirugía endoscópica nasosinual para tratar lesiones o problemas dentro de la nariz que impidan respirar con normalidad, afecten al olfato o provoquen dolores de cara y cabeza. O por otra parte, en Cirugía General y del Aparato Digestivo puede emplearse la técnica de endoscopia o laparoscopia en la cirugía bariátrica (cirugía de la obesidad). También puede realizarse una endoscopia de urgencia, como sucede en el campo de la Neurocirugía para tratar una hemorragia cerebral o accidente cerebrovascular (Ictus).

La cirugía endoscópica es aquella en que el abordaje de los órganos se efectúa a través de instrumentos ópticos que permiten la visión de cavidades anatómicas del cuerpo humano en donde éstos se hallan contenidos, y el ejercicio de procedimientos técnico-quirúrgicos con fines terapéuticos.

Toma su nombre de acuerdo con la región en la que se practica; así, se refiere a:

  • Cirugía toracoscópica para la cavidad torácica

  • Cirugía laparoscópica para la cavidad abdominal

  • Cirugía culdoscópica, que se lleva a cabo a través del fondo de saco posterior de la vagina

  • Cirugía endoscópica transuretral, como en el caso de la resección de próstata por esta vía o algún procedimiento a nivel de la vejiga urinaria e incluso de los uréteres

  • Cirugía artroscópica a nivel de las articulaciones, como en la rodilla

¿En qué consiste?

La cirugía endoscópica consiste en la introducción de un endoscopio, que es un instrumento óptico en forma de tubo con una cámara de vídeo e iluminación en el extremo, a través de alguno de los orificios naturales del cuerpo o a través de una incisión, para que así el especialista cirujano pueda observar a través de un monitor de televisión el órgano o zona a tratar. Además, a través del endoscopio pueden introducirse distintas herramientas para realizar la cirugía.

La técnica NOTES se define actualmente como una técnica quirúrgica, según la cual puede realizarse cirugía abdominal sin incisiones en la piel. Mediante un endoscopio se llega a la cavidad abdominal pasando a través de un orificio natural (vulva, boca, uretra, ano, etc.) y, a través de una incisión interna en el fondo de saco de la vagina, el estómago, la vejiga o el colon, se evitaría cualquier incisión o cicatriz externa.

La cirugía NOTES tiene sus inicios en 2004 por A. Kalloo en el John Hopkins Hospital. Se basa en una cirugía endoluminal y desarrolla un modelo experimental de nuevo abordaje quirúrgico a la cavidad abdominal. Concluye en la peritoneoscopia transgástrica y es factible para el diagnóstico y tratamiento de determinadas dolencias. Simultáneamente, Reddy y Rao describen casos de apendicetomías y otras cirugías híbridas realizadas en humanos en India. El 2 de abril de 2007, en el Hospital Universitario de Estrasburgo, el Profesor Jacques Marescaux y su equipo realizaron con éxito la extirpación de la vesícula biliar por vía transvaginal en una paciente de 30 años de edad.

Fue la primera operación sin cicatriz puesta en práctica, con la ayuda de un endoscopio flexible. Se la conoce como Operación Anubis. Realizada sin ninguna incisión (excepto el hecho de utilizar una aguja de 2 mm permitiendo la insuflación y el control de la presión intraabdominal), sin duda representa un paso importante hacia la cirugía totalmente no invasiva. El próximo reto será validar otros abordajes, en los que la vía transgástrica parece ser hoy en día la más atractiva.


Preparación para la cirugía endoscópica

Antes de la cirugía, el paciente deberá informar a su médico acerca de su estado de salud y medicación que está tomando, así como se observar su historial médico y se someterá a diversas pruebas para valorar si puede someterse a la operación. Por lo general, estas pruebas diagnósticas previas incluirán los análisis clínicos, aunque en función de la cirugía y las características del paciente, el especialista puede requerir más pruebas concretas.

Como la cirugía endoscópica se realiza bajo anestesia general, también suele requerirse al paciente un ayuno de 8 horas previas a la intervención.


Cuidados tras la intervención

La principal ventaja de la cirugía endoscópica es que al ser menos invasiva que otras técnicas quirúrgicas, permite un postoperatorio mucho más corto. Así, el paciente permanecerá hospitalizado pocas horas, pudiendo incluso volver a casa el mismo día de la intervención. En líneas generales, podrá reincorporarse a su actividad habitual a las 48-72 horas tras la intervención.

Las molestias del postoperatorio también son menores, de manera que el paciente no requiere reposo absoluto y puede desarrollar su vida con normalidad.

Alternativas a la cirugía endoscópica


La alternativa a la cirugía endoscópica es la cirugía abierta convencional. Esta otra técnica no es un avance, sino que se trata de una técnica anterior, que supone mayor riesgo de complicaciones, un postoperatorio más largo y complicado, así como cicatrices más grandes y visibles.

Por otra parte, un avance en las técnicas de cirugía mínimamente invasiva como la cirugía endoscópica es la cirugía robótica, que consiste en estas técnicas llevadas a cabo por el especialista cirujano a través de un sistema robótico de alta precisión que permite una visión mejorada del área a tratar y movimientos con las herramientas quirúrgicas que serían imposibles de realizar por un humano, sin la ayuda del sistema robótico.


La cirugía endoscópica transluminal a través de orificios naturales, más conocida por sus siglas inglesas NOTES (natural orifice transluminal endoscopic surgery), es el paradigma de la evolución de la cirugía mínimamente invasiva.

El endoscopio es el instrumento fundamental en esta cirugía menos invasiva.

La cirugía moderna es el trabajo de un equipo multidisciplinario, y la cirugía NOTES es un claro ejemplo de ello.

El objetivo de este tipo de cirugía es realizar los procedimientos laparoscópicos convencionales sin ninguna incisión, usando la tecnología endoscópica flexible, utilizada habitualmente en el diagnóstico y el tratamiento de lesiones intraluminales, y accediendo al interior de la cavidad abdominal a través de los orificios naturales (boca, ano, vagina e incluso uretra). Este tipo de acceso abre un campo muy interesante para determinados pacientes, como los que tienen un elevado riesgo quirúrgico, los obesos mórbidos o los que tienen antecedentes de múltiples cirugías abdominales previas o infecciones de herida quirúrgica.

Usando modelos animales se ha podido demostrar que es posible realizar una gran variedad de intervenciones (colecistectomía, apendicectomía, esplenectomía, histerectomía, ligadura de trompas, gastroenteroanastomosis, peritoneoscopia, biopsia hepática y herniorrafia, entre otras). Sin embargo, y antes de su implementación en los humanos, esta nueva técnica debe demostrar que es segura y ofrece ventajas reales para los pacientes. Por tanto, se debe encontrar solución a una serie de problemas, que incluyen métodos seguros para el cierre de la incisión gástrica y evitar la aparición de infecciones, entre otros.

Otro elemento crítico para el desarrollo de esta nueva cirugía es la creación de instrumental apropiado, por lo que es necesario el esfuerzo no sólo de los profesionales médicos, sino también de los ingenieros y de la industria de dispositivos médicos.

Uno de los avances más relevantes que han ocurrido en las últimas décadas en el campo de la cirugía ha sido, sin duda alguna, la introducción de la cirugía laparoscópica y con ella el concepto de cirugía mínimamente invasiva. Esta técnica quirúrgica ha ganado aceptación al demostrar que es una alternativa segura y menos invasiva que la cirugía convencional.


La «revolución» laparoscópica ha introducido tres nuevas y radicales ideas en la cirugía general:

a) el tamaño de la incisión realmente importa en la recuperación del paciente;

b) la cirugía moderna es el trabajo conjunto de un grupo multidisciplinario, y

c) la tecnología desempeña un papel importante en la potenciación de la capacidad del cirujano.


Las técnicas de cirugía mínimamente invasiva han ido evolucionando durante más de 100 años, desde que en 1901 el cirujano alemán Georg Kelling realizara la primera laparoscopia experimental. Sin embargo, los primeros estudios no obtuvieron el apoyo de la comunidad médica del momento y no fue hasta la década de los treinta cuando los avances técnicos en laparoscopios, lentes y técnicas de insuflación llevaron a la amplia aceptación de la técnica para propósitos diagnósticos y unas pocas aplicaciones terapéuticas ginecológicas básicas. Finalmente, en 1987 el ginecólogo francés Mouret realizó la que para muchos se considera la primera colecistectomía laparoscópica. Desde ese momento, el interés por la técnica laparoscópica se extendió rápidamente y modificó de manera radical la forma en que los cirujanos generales consideraban la cirugía.

Paralelamente, en el campo de la endoscopia digestiva, el desarrollo de herramientas cada vez más sofisticadas ha permitido a los gastroenterólogos extirpar lesiones más grandes y más profundas, incluso por debajo de la capa mucosa de la pared del tubo digestivo. La ultrasonografía endoscópica y la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica han permitido visualizar e incluso introducir agujas y prótesis más allá de la pared del tubo digestivo. E incluso se han realizado técnicas combinadas endoscopia-laparoscopia para acceder al interior de la luz del tubo digestivo.

La cirugía endoscópica transluminal a través de orificios naturales, más conocida por sus siglas inglesas NOTES (natural orifice transluminal endoscopic surgery), es la fusión lógica de estos conceptos, debido a que es una técnica poco invasiva, se lleva a cabo necesariamente en equipo y utiliza la tecnología de manera intensiva. Mediante la combinación de los dos abordajes convencionales de la cirugía guiada mediante imagen (la endoscopia flexible y la laparoscopia), la NOTES tiene el potencial de incrementar el espectro de actuación de estos abordajes, con el consiguiente potencial beneficio para los pacientes. Al eliminar las incisiones abdominales, la NOTES pretende evitar las complicaciones asociadas a la cirugía tradicional y laparoscópica (dolor en la pared abdominal, infección de la herida, hernias, adhesiones…).

Actualmente, la NOTES está generando un gran interés y una investigación exhaustiva por parte de los cirujanos, los endoscopistas y la industria de dispositivos médicos, que están trabajando en equipo en el desarrollo de nuevos instrumentos, así como en el diseño de los procedimientos y en la evaluación de los efectos que este nuevo abordaje puede tener en los pacientes.

VENTAJAS DE LA CIRUGÍA NOTES

Todas las premisas de la cirugía transluminal se basan en sus potenciales ventajas, asociadas con un acceso a la cavidad peritoneal sin cicatrices. Sin embargo, hasta ahora no se han publicado estudios que demuestren la existencia de estas ventajas. Los estudios necesarios para demostrar la eficacia de NOTES en la prevención de la eventración, las adherencias y el dolor de la pared abdominal podrían requerir años de seguimiento.

Hasta que las dudas acerca de las ventajas de la NOTES no se resuelvan, los beneficios potenciales de la cirugía transluminal seguirán siendo teóricos y sin bases científicas. Sin embargo, la experiencia que tenemos con la cirugía laparoscópica podría ser trasladada a la NOTES. La cirugía laparoscópica ha demostrado en innumerables estudios publicados que tiene una menor morbimortalidad respecto a la cirugía convencional, todo ello en relación con la menor agresión quirúrgica que conlleva. Algunos estudios publicados demuestran que posiblemente el factor más importante que contribuye a la menor agresión es el tamaño de la incisión y, por tanto, ésta sería la base de las potenciales ventajas que ofrecería la cirugía NOTES: la ausencia de incisiones.

Las consecuencias inmunológicas de NOTES también parecen ser favorables para el paciente. Un reciente estudio experimental ha mostrado unos valores más bajos de factor de necrosis tumoral alfa (TNFa) tras la realización de peritoneoscopia por NOTES, comparada con la exploración abdominal con laparoscopia y laparotomía. Por tanto, NOTES puede preservar la función inmune postoperatoria y mejorar los resultados infecciosos y oncológicos. Así, algunos de los potenciales beneficios de la cirugía NOTES son los siguientes:

    1. Ausencia de incisiones en la pared abdominal.

    2. Reducción del dolor postoperatorio.

    3. Posibilidad de utilizar un tipo de anestesia diferente de la general, ya que al no realizar incisiones en la pared abdominal, los requerimientos para analgesia podrían ser satisfechos con una sedación profunda.

    4. Disminución de complicaciones relacionadas con las heridas (infección, hernias, implantes metastásicos, etc.).

    5. Posibilidad de realizar este tipo de cirugía como cirugía ambulatoria.

    6. Rápida recuperación postoperatoria, disminución del íleo postoperatorio.

    7. Mejor resultado estético, ausencia de cicatrices abdominales.

    8. Disminución de la formación de adherencias y, por tanto, reducción de la incidencia de oclusión postoperatoria y simplificación de futuras intervenciones abdominales.

    9. Los procedimientos NOTES pueden realizarse sin instrumentos estériles, sólo con instrumental sometido a un alto nivel de desinfección. Esto hace que la NOTES sea un procedimiento atractivo para ambientes austeros, como en los países subdesarrollados, donde no se dispone de una correcta esterilización.


Sin embargo, y a pesar de todas las ventajas que a priori ofrece la cirugía NOTES, y como en cualquier procedimiento quirúrgico, algunas complicaciones son inevitables.

LIMITACIONES DE LA CIRUGÍA NOTES

Los dispositivos endoscópicos usados actualmente para la NOTES están diseñados para el uso intraluminal (p. ej., biopsia, polipectomía, hemostasia, etc.). La disposición en línea de los instrumentos endoscópicos limita la movilidad de éstos e impide que estas herramientas puedan emplearse para la resección de órganos, retracción de tejidos o aposición, sutura u otros procedimientos quirúrgicos.

El hecho de no disponer de instrumentos adecuados imposibilita poder realizar una disección meticulosa con NOTES. Además, las necesidades básicas para la cirugía mínimamente invasiva, como la triangulación, no pueden cubrirse con los endoscopios terapéuticos estándares.

La falta de instrumentos apropiados ha llevado a un aumento en la colaboración entre los cirujanos, los gastroenterólogos y los expertos de la industria para el desarrollo de herramientas específicamente diseñadas para la cirugía transluminal.

El instrumental para NOTES debería evaluar temas de triangulación, retracción tisular, aposición y otros.

Otro de los inconvenientes de la cirugía NOTES es que es necesario perforar una víscera de forma intencionada, con lo cual contradecimos un dogma quirúrgico establecido hace décadas. Con esto el paciente puede ser susceptible a unas hipotéticas consecuencias infecciosas e inmunológicas que no están presentes en la cirugía laparoscópica y convencional.

Por otro lado, la flexibilidad del endoscopio impide obtener una visión estable del campo quirúrgico. Además, para poder visualizar determinados campos es necesario colocar el endoscopio en retroflexión y, por tanto, la imagen endoscópica puede ser invertida, o «en espejo», lo que complica la cirugía.

Otra de las limitaciones actuales de la NOTES es la necesidad de un aprendizaje específico de la técnica. Los gastroenterólogos son médicos clínicos especializados, y la endoscopia transluminal es una técnica quirúrgica. Aunque el entrenamiento de los gastroenterólogos les permite realizar la endoscopia tradicional con seguridad, el mismo entrenamiento no abarca la cirugía transluminal. La habilidad para manejar adecuadamente las complicaciones intraabdominales con riesgo vital, como hemorragia, la perforación o la lesión de órganos, pertenece al dominio de la cirugía. De la misma manera, la mayoría de los programas de formación quirúrgica no dota a los cirujanos de las destrezas endoscópicas necesarias para realizar procedimientos estándares si la técnica de NOTES se realiza en seres humanos. Por tanto, la estructura del programa de formación en gastroenterología y cirugía debería modificarse. La introducción de un grado avanzado de entrenamiento en NOTES será probablemente necesaria. Por tanto, antes de la incorporación de NOTES como procedimiento estándar, será necesario una modificación de los programas de formación, para rectificar las deficiencias que se detectan en la actualidad.

Cirugía Endoscópica Digestiva

Esta subespecialidad de la cirugía aborda el manejo de patologías específicas de la región digestiva. Los especialistas en esta área de atención se encargan de la prevención, diagnóstico y tratamiento oportuno de lesiones benignas o malignas del esófago, estómago, intestino delgado, colon, vías biliares y páncreas.

La endoscopía intervencionista o cirugía endoscópica es un procedimiento especializado, que permite abordar, de forma mínimamente invasiva, las hemorragias digestivas alta y baja, extracción de cuerpos extraños, dilatación de estrechez del tubo digestivo y colocación de prótesis, extirpación de pólipos, tratamiento de enfermedades de la vía biliar, intestino delgado y de colon, así como también la colocación de sondas para alimentación (gastrostomía).


Tipos de procedimientos quirúrgicos:

  • Esófago-gastro-duodenoscopía diagnóstica y terapéutica (tratamiento de la hemorragia digestiva y extracción de cuerpos extraños).

  • Test de ureasa.

  • Colonoscopía diagnóstica y terapéutica.

  • Colangiopancreatografía retrógrada y extracción endoscópica de cálculos biliares.

  • Dilatación de estenosis benignas o malignas.

  • Instalación de prótesis en el tubo digestivo.

  • Extracción endoscópica de pólipos.

  • Tratamiento del vólvulo de colon por colonoscopía.

  • Polipectomía o mucosectomía endoscópica alta y baja.

  • Gastrostomía endoscópica percutánea (GEP).

Colangio Pancreatografía Retrógrada Endoscópica (C.P.R.E.)

La prueba denominada colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE) es una intervención mixta endoscópica y radiológica, utilizada para estudiar y, principalmente tratar, las enfermedades de los conductos biliares y del páncreas. El conducto que conduce la bilis al intestino, procedente de la vesícula biliar y del hígado (llamado colédoco), y el conducto principal que lleva las secreciones del páncreas (denominado conducto de Wirsung), se unen en un mismo lugar para verter en el duodeno (primera parte del intestino delgado) sus sustancias, que son necesarias para hacer la digestión. El lugar donde ambos conductos se unen se llama papila de Vater. La papila tiene un esfínter o músculo circular, que se abre y cierra cuando es preciso verter la bilis y la secreción pancreática al duodeno. En algunas ocasiones, el páncreas vierte casi todas sus secreciones en el duodeno por un conducto accesorio, que no desemboca como el conducto principal de Wirsung en la papila.

El objetivo es canular la papila y uno o los dos conductos (colédoco, Wirsung). Esta maniobra consiste en introducir en la papila un pequeño tubo plástico (catéter o cánula). Para llegar hasta la zona de la papila se utiliza un endoscopio o sonda óptica flexible que se introduce por la boca. Habitualmente, se emplea un endoscopio especial para la CPRE llamado "duodenoscopio" que a diferencia del convencional, éste tiene visión lateral gracias a un sistema de prismas.

La canulación de la papila y del conducto deseado (Colédoco y/o Wirsung) es uno de los puntos más cruciales en la CPRE. En ocasiones, esta maniobra es muy compleja y, de hecho, la CPRE se considera como una de las intervenciones más difíciles de la Endoscopia Digestiva. Una vez canulada la papila se inyecta a través del catéter un contraste radiológico. De esta forma se "dibujan" los conductos que pueden observarse con radiografías fijas o bien de forma dinámica (fluoroscopia). Ésto último es lo ideal, o sea verlo con intensificador de imágenes en tiempo real. Por lo tanto, la CPRE se realiza habitualmente en una sala provista de rayos X. Para que el paciente esté tranquilo durante la CPRE, pueden utilizarse distintos tipos de sedación: anestesia general, sedación profunda o sedación consciente.


INTERVENCIONES TERAPÉUTICAS EN LA CPRE

Antes de que se haya indicado una C.P.R.E., se han podido realizar otro tipo de exploraciones (análisis, ecografía, ecoendoscopia, resonancia magnética, etc.) en las que se ha diagnosticado una enfermedad del colédoco o del páncreas.

Generalmente, se trata de una obstrucción de uno de estos conductos, o bien ocurre que sus líquidos se vierten en el interior del abdomen y no en el intestino. Esto último es lo que se denomina fístula biliar (del colédoco) o fístula pancreática (del Wirsung).

La mayoría de las C.P.R.E. tienen un fin terapéutico: solucionar fístulas u obstrucciones.

Una de las maniobras terapéuticas más frecuentes es seccionar (cortar) el músculo esfinteriano de la papila para agrandar su abertura al duodeno. Es lo que se denomina esfinterotomía o papilotomía, que puede hacerse en la vertiente del colédoco (esfinterotomía biliar), en la del páncreas (esfinterotomía pancreática), o en las dos.

La esfinterotomía se realiza pasando una corriente eléctrica a través de un catéter especial denominado esfinterótomo o papilótomo para cortar la papila.

El orificio papilar puede también agrandarse dilatándolo con un balón. Es lo que se denomina esfinteroplastia.

Algunas otras de las múltiples intervenciones que pueden llevarse a cabo en la C.P.R.E. son: extracción de piedras en el colédoco (coledocolitiasis), colocación de tubos plásticos o metálicos (prótesis o Stents) en el colédoco o páncreas para tratar estrecheces (estenosis), fístulas u otros problemas que afecten a los conductos. Estas prótesis pueden ser temporales o permanentes, según el tipo de obstrucción.

Y se pueden realizar biopsias de hallazgos tumorales en colédoco o páncreas.


LITIASIS RESIDUAL DE COLÉDOCO

Muchas veces la indicación es la presencia de "litiasis residual", que ocurre en pacientes que fueron operados de litiasis vesicular (colecistectomía laparoscópica o convencional), y en el postoperatorio presentaron Síndrome Coledosciano: Ictericia (coloración amarilla de la piel), Coluria (coloración oscura en la orina) y Acolia (aclaramiento o pérdida de color en la materia fecal). El síndrome coledosciano nos evidencia una obstrucción del conducto Colédoco y seguramente por cálculos que pasaron de la vesícula antes o durante la operación. Si los cirujanos realizan de rutina una colangiografía intraoperatoria (Mirizzigrafía) podrían detectar éste problema y deben continuar la operación, realizando una sección del colédoco y extracción de esos cálculos mediante pinzas especiales, catéter con balón o canastillas de Dormia, y postriormente dejar en el colédoco un drenaje llamado "Tubo de Kehr" (que es transitorio). Dependiendo de la habilidad quirúrgica, muchas veces obliga a la conversión de una cirugía laparoscópica a una convencional. Si el cirujano sospechara ésta eventualidad o si el paciente presentara síndrome coledosciano antes de la cirugía, podría solicitar una C.P.R.E. previa a la intervención. Se le extraen los calculos coledoscianos por C.P.R.E. y luego se efectúa la colecistectomía con la seguridad de que no habrá nuevos problemas.


RIESGOS Y COMPLICACIONES

Como se ha dicho, la C.P.R.E. es uno de los procedimientos endoscópicos digestivos más complicados y, al mismo tiempo, es una de las formas menos invasivas y sencillas de tratar las obstrucciones y fístulas biliopancreáticas.

Ante todo debe comprenderse que es un procedimiento complejo y que en alrededor del 10% existen complicaciones. A veces la C.P.R.E. es fallida porque no consigue canularse adecuadamente la papila o el conducto deseado, y en ese caso, la resolución será quierúrgica.

Las complicaciones más frecuentes son la pancreatitis aguda (por la manipulación de la papila), la hemorragia (por la esfinterotomía), la infección de la bilis (colangitis o colecistitis), y en ocasiones, la perforación del intestino.

Muchas de estas complicaciones pueden tratarse de forma conservadora (estando unos días con sueros, sin comer) o bien con algún tipo de endoscopia. No obstante, algunas complicaciones pueden ser lo suficientemente importantes como para requerir un tratamiento urgente, incluso una operación.

Debe comprenderse, también, que antes de indicar una C.P.R.E. se han valorado convenientemente las habituales grandes ventajas de esta intervención endoscópica, contraponiéndola a los posibles riesgos.

Imágen radiológica contrastada de la C.P.R.E.

Esfinteroplastía. Uso de catéter con balón

Colocación de Stent en el Colédoco.