Formación básica

Este Plan, como dijimos, va dirigido a personas que no alcanzan los mínimos para iniciar la ESPA. El Plan se articula en dos niveles en los tres ámbitos, cada uno de los cuales consta de tres módulos y estos a su vez se componen de bloques. Dentro de cada bloque están los contenidos, los objetivos, la metodología y los criterios de evaluación.

Para determinar la matriculación en el nivel correspondiente, el maestro o maestra tutor hace una evaluación inicial con un informe individualizado del alumnado en cada ámbito en los primeros días de curso, cuyos resultados orientarán sobre la adecuación del currículo a las características y conocimientos del alumnado.

La evaluación se realiza de forma continua para cada uno de los módulos que forman los ámbitos. Los criterios de evaluación establecidos en los módulos, y que aparecen en la Orden de 10 de agosto de 2007, por la que se regula el Plan Educativo de Formación Básica para Personas Adultas, son el referente fundamental en cada nivel, tanto para valorar el grado de adquisición de las competencias básicas como el de consecución de los objetivos propuestos. De manera que si la calificación trimestral de los módulos es positiva, a lo largo del curso, se aprueba el ámbito completo, y cada ámbito es independiente en su calificación respecto a los otros.

Las sesiones de evaluación de los módulos, que componen cada ámbito, se realizan una vez al trimestre. En ellas se considera que un alumno o alumna los ha superado cuando alcanza las competencias básicas y los objetivos establecidos para cada uno de ellos. Para confirmar la superación del nivel I y la continuidad al nivel II se lleva a cabo una sesión de evaluación final, mediante una valoración global de los ámbitos que componen dicho nivel.

En el nivel II aquellos alumnos o alumnas que no superan algún módulo, de cualquiera de los ámbitos en la sesión de evaluación correspondiente, pueden recuperarlo antes de la finalización del curso escolar. Al alumnado que le quede por superar algún módulo al final del curso se le facilitan actividades de refuerzo con vistas a la prueba extraordinaria de septiembre.

El tutor o tutora informa al alumnado sobre sus calificaciones en los distintos ámbitos y las recomendaciones para superar las dificultades de aprendizaje detectadas. Cada ámbito del nivel correspondiente recibe una única calificación. En el nivel I las calificaciones se expresan, para cada ámbito, con los términos «superado» o «no superado». Y para el nivel II las calificaciones son: Insuficiente (IN), Suficiente (SU), Bien (BI), Notable (NT) o Sobresaliente (SB). Dicha calificación va acompañada de un número sin decimales de uno a diez, correspondientes: Insuficiente: 1, 2, 3 ó 4. Suficiente: 5. Bien: 6. Notable: 7 u 8. Sobresaliente: 9 ó 10.

Promocionan al nivel II del plan educativo de Formación Básica aquellos alumnos y alumnas que alcanzan las competencias básicas y los objetivos propuestos para el nivel I en cada ámbito. Las personas que superan todos los ámbitos que componen el nivel II reciben un certificado de superación del plan educativo de Formación Básica para personas adultas, de acuerdo con el modelo que se recoge en el Anexo II de la Orden de 10 de agosto de 2007 por la que se regula el Plan Educativo de Formación Básica para Personas Adultas.

Conviene conocer algunos documentos propios de esta evaluación según los modelos de los Anexos III y IV de la Orden 10 de agosto de 2007:

-Acta de Evaluación del grupo, en la que se detallan las calificaciones obtenidas por el alumnado en los distintos módulos que componen cada ámbito y nivel, así como las decisiones sobre la promoción del alumnado de nivel I al II o las decisiones sobre certificación del plan educativo. Los datos de las actas se graban en Séneca con fecha de la sesión de evaluación, se imprimen y firman, al igual que los boletines para el alumnado.

-Expediente académico del alumnado, en los que aparecen reflejados los datos referidos a su progreso académico en la etapa, junto con la validación de conocimientos adquiridos.