2016 - Pri Francisco Azorín

EKSPOZICIO EN ZARAGOZO

PRI FRANCISCO AZORÍN

Esperantisto kaj grava historia figuro iom forgesita

Inauguro la 16an de septembro (vendrede), je 19:00 h

En Biblioteca de Aragón, en Zaragoza. Calle Doctor Cerrada, 22.

Ekspozicio pri FRANCISCO AZORÍN

La Biblioteca de Aragón en Zaragoza acoge desde el viernes 16 la exposición “De vuelta a casa. Francisco Azorín, el turolense errante” de la Fundación Amantes de Teruel

La sala de exposiciones de la Biblioteca de Aragón en Zaragoza inaugurará el próximo viernes, día 16, a las 19 horas la exposición de la Fundación Amantes “De vuelta a casa. Francisco Azorín, el turolense errante”, que podrá verse hasta finales del mes de octubre. La muestra está dedicada a una de las figuras más destacadas del exilio republicano a la vez que desconocidas en Aragón, el arquitecto, político, escritor, profesor y esperantista Francisco Azorín Izquierdo.

Nacido en Monforte de Moyuela en 1885 y fallecido en Ciudad de México en 1975, Francisco Azorín Izquierdo es un referente del exilio republicano en América Latina y un personaje por rescatar en la memoria histórica después de que tras la guerra civil su nombre fuera condenado al olvido en España como el de tantos desplazados por la contienda bélica y la dictadura.

A la inauguración de este viernes en Zaragoza está previsto que asistan dos nietos de Azorín y un bisnieto: Ernesto Azorín, que ha viajado desde Luxemburgo para asistir al acto, Rosa del Carmen Azorín, que lo ha hecho desde México, y Sebastián Azorín, que se desplazará desde Barcelona.

La exposición ha sido organizada en Zaragoza por la Biblioteca de Aragón y la Fundación Amantes de Teruel y se compone de varios paneles expositivos que ofrecen un recorrido por la trayectoria vital y profesional de Azorín, junto a diversas publicaciones en torno a su persona.

Los materiales expuestos no solo acercan al visitante a la vida de este personaje sino que también ilustran algunos de los acontecimientos que marcaron la España del siglo XX: el éxodo rural hacia las grandes urbes con la consiguiente despoblación del campo; la aparición de los movimientos obreros y políticos para configurar una sociedad democrática en la que se reconociesen los derechos de la clase trabajadora; la persecución y represión de cualquier atisbo de humanismo progresista que buscase equiparar España con el resto de Europa; los procesos políticos vividos en la sociedad española durante las primeras décadas del siglo pasado; y la guerra civil y el exilio con la aparición de una nueva identidad española, la de los descendientes de los exiliados nacidos en los países que les dieron acogida y en los que se han mantenido vivos los valores de la II República a través de sucesivas generaciones.

La exposición pretende la recuperación para Aragón de un turolense que fue una figura destacada en la España de las primeras décadas del siglo XX y cuyo recuerdo histórico fue borrado por la dictadura, habiendo permanecido oculto para la sociedad aragonesa hasta fechas muy cercanas a raíz de su redescubrimiento para Teruel en una exposición celebrada en el Palacio de Bellas Artes de México en el año 2014, coincidiendo con los actos conmemorativos del 75 aniversario del exilio republicano español, y de la publicación de un libro en ese mismo país sobre Francisco Azorín y otros republicanos españoles exiliados en México.

“De vuelta a casa. Francisco Azorín, el turolense errante” ha podido verse hasta ahora en Teruel capital y en Cella, y llega ahora a Zaragoza con motivo de haberse cumplido el 40 aniversario del fallecimiento de Azorín, y coincidiendo con el 80 aniversario del estallido de la guerra civil española que empujó al exilio a cientos de miles de personas que nunca pudieron regresar a su país.

Francisco Azorín Izquierdo fue un importante arquitecto y político que desarrolló la mayor parte de su actividad profesional en Córdoba, lugar al que emigró y donde se asentó sin perder los vínculos con su Teruel natal a pesar de la distancia. De él escribió el célebre escritor norteamericano John Dos Passos en el libro “Rocinante vuelve al camino”, que cualquier obrero y campesino andaluz hubiese dado la vida por Azorín, puesto que impulsó la creación de grupos escolares, además de promover el derecho de los trabajadores a una vivienda digna a través de la Fundación Pablo Iglesias.

Azorín fue un destacado municipalista y desarrolló una intensa actividad política dentro del PSOE como concejal y diputado provincial en Córdoba, así como parlamentario en las Cortes Constituyentes de la II República en 1931.

Especialista en esperanto de referencia internacional, fue también masón y escribió varios libros y numerosos artículos en prensa, siendo elegido en 1924 académico de número de la Real Academia de Bellas Artes y Nobles Letras de Córdoba.

Durante la guerra civil desempeñó cargos de responsabilidad para el Gobierno de la República y fue cónsul en Tarbes y Toulouse, desde donde facilitó la llegada de refugiados españoles a Francia.

Persona de referencia del exilio republicano español en México, la última obra que acometió con casi 90 años fue el monumento de los exiliados republicanos españoles a Lázaro Cárdenas en el Parque España de Ciudad de México, un proyecto común de su hijo Ángel Azorín, quien lo lideró, junto con su nieto Telmo y él mismo, que hoy día simboliza por extensión, con una gigantesca mano abierta tendida que da acogida, el drama de los refugiados y desplazados en todo el mundo.