Con la muerte en los talones, de Alfred Hitchcock. Debido a un malentendido, a Roger O. Thornhill, un ejecutivo del mundo de la publicidad, unos espías lo confunden con un agente del gobierno llamado George Kaplan. Secuestrado por tres individuos y llevado a una mansión en la que es interrogado, consigue huir antes de que lo maten. Cuando al día siguiente regresa a la casa acompañado de la policía, no hay rastro de las personas que había descrito.(Filmaffinity) Alfred Hitchcock, el genial maestro del arte de suspense, le da aquí un giro al clásico héroe de las películas de aventuras. Cary Grant -el actor que encarna al protagonista- se ve envuelto "sin comerlo ni beberlo" en una trama de espías. El "encargo" del que accidentalmente habrá de responsabilizarse será, como tantas veces, doble: por una parte, recuperar un microfilm valiosísimo para los servicios secretos británicos (algo así como un pendrive con información ultrasecreta); por otra, salvar a "la chica" de la que, inevitablemente, se irá enamorando. Si ya en muchos mitos, leyendas y novelas, el momento de la huida del protagonista tenía gran relevancia, no es difícil imaginar que en el mundo audiovisual esa importancia se multiplique: baste con pensar en las películas de James Bond, en las que una vez cumplida la misión encomendada, el protagonista ha de huir por tierra, mar y aire desafiando a todo tipo de adversarios o dificultades. La espectularidad de estas secuencias se logra no solo en el rodaje, buscando imágenes y encuadres impactantes,sino también en la sala de montaje, donde se busca un ritmo frenético por medio de una vertiginosa sucesión de planos que apenas duran unos segundos en pantalla. En contraste con ello, la película que en esta ocasión os recomendamos logra la misma tensión en cada una de las memorables huidas del protagonista por medio de otros procedimientos, que entre todos trataréis de descubrir. Aquí os hemos seleccionado algunas de esas escenas aunque lo deseable es que veáis la película completa, por supuesto. Escapada uno: en el maizal Escapada dos: en la subasta Escapada final: en las montañas Rushmore Después de ver la película (o los fragmentos seleccionados)
|